Durante el siglo XIX, Montevideo fue cuna de infinitas y apasionadas historias. Entre ellas las de Don José de Buschental, propietario de la quinta del Buen Retiro, que con el paso del tiempo se convertiría en el Paseo del Prado, y Orfilia, viuda uruguaya de reconocida familia e importante posición social. Orfilia, «la del cuerpo de culebra», según comentarios de la época, tuvo casa en la misma quinta del magnate, donde hoy es la sede del Club Atlético Stockolmo .El romance fue inevitable, no era raro verlos caminar en los jardines durante los veranos montevideanos.
Desde el 2017 en Orfilia rescatamos del pasado esta singular historia a través de aromas, sabores y calidez de nuestros espacios en la esquina más linda del Prado.